Preocupación en la asociación de vecinos del paseo de Linarejos ante el retraso de las obras del parking de Santa Margarita y los ruidos de la zona

La asociación de vecinos del paso de linarejos ha mostrado su malestar por las numerosas molestias con las que conviven en la actualidad. Principalmente por el retraso en el proyecto del parking de Santa Margarita y el ruido ocasionado por las prácticas de ocio juvenil nocturno.

Dos motivos que en la mayor parte de los casos fundamentan las quejas que llegan por parte de los vecinos del paseo de Linarejos. Así lo explicaba el presidente de este colectivo vecinal quien de un lado ha criticado el enorme retraso con el que se llevan a cabo las labores de construcción del futuro parking de Santa Margarita. En este sentido, lamente el que hasta la fecha aún no se haya dado comienzo a las obras propiamente dichas y que se estén prolongando tanto en el tiempo los trabajos de adecuación de las canalizaciones.
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Un retraso para el que según Juan Callejas, de momento no han recibido justificación alguna a pesar de las numerosas entrevistas que la junta directiva de la asociación vecinal que preside ha mantenido con el concejal responsable del área de obras del ayuntamiento. La próxima, según anunciaba podría tener lugar durante esta semana.

Por otra parte, Juan Callejas se ha referido a la posible ubicación del futuro botellódromo en la Estación de Madrid, como otra de las cuestiones que principalmente preocupan a los vecinos. Asegura, que de hecho son ya muchos los jóvenes que utilizan este recinto para llevar a cabo esta práctica, algo que tiene muy preocupados a los residentes en la zona, quienes no descartan emprender movilizaciones y exigen una reunión conjunta en la que estén presente todas las partes implicadas en esta cuestión. Además, el presidente de la asociación de vecinos considera que este no es el lugar más adecuado, en tanto que en él está previsto la ejecución de un proyecto en próximas fechas.

de otro lado, la inminente llegada de las fiestas de San Agustín también empieza a preocupar a los vecinos del paseo de Linarejos. Consideran que el ruido de las casetas es descomunal, por lo que creen conveniente que el ayuntamiento fije unos límites en la potencia y en los horarios.

Quejas que esperan obtener una respuesta en breves fechas que ofrezcan soluciones a gusto de todas las partes implicadas.